¡Feliz Domingo de Ramos!

Molde de estrecha vía,

dos hileras luminosas,

prisionera de las rosas

viene la Virgen María.

 De plata y de pedrería

lleva las andas repletas

y a su paso las saetas,

para su lujo y derroche,

se van clavando en la noche,

constelada de cornetas.

Mi viewjo diario, Aunque uno ya anda un poco de vuelta en estas cosas, el pellizco en el estómago se repite cada Domingo de Ramos. A lo más, en lo único que uno ha podido cambiar con los años es en la posibilidad que su experiencia le otorga de ser más selectivo y en la simplificación del sentimiento interior que todo esto le produce. Recupero, tal como la memoria me los dicta, estos repetidísimos pero impresionantes versos que Federico García Lorca escribió, allá por los años treinta, al contemplar el paso de la Virgen de las Angustias en el entorno de su barrio de San Agustín, sólo para desearos a todos un Feliz Domingo de Ramos.

Ya te contaré otra vez...