entradilla

miércoles, 28 de marzo de 2012

El azahar otra vez

Mi viejo diario, hace unos días, mientras paseaba, mis sentidos eran sorprendidos por la primera acometida de azahar de este año. Dado que a tus páginas le ocurre lo mismo que a los anuncios de hamburguesas, que no pueden transmitir ni sabores ni olores, en plena semana de pasión, te dejo, como única posibilidad de compartir contigo lo que sentí, la imagen del naranjo que el otro día me sacó súbitamente de mis pensamientos con aquella perdigonada aromática tan primaveral, tan cofradiera y tan cordobesa.
Ya te contaré otra vez...
Mi viejo diario, edito porque mis ocupaciones de esta mañana me han llevado a recorrer algunos lugares de la Córdoba inveterada. De casa a los Trinitarios, de los Trinitarios a la Magdalena, luego a la Almagra y a Santa Marina.

Y tanto  las ringleras de naranjos en flor como los naranjos acomodados a la forma caprichosa de cada plazuela, que se han ido alternando a lo largo de todo mi paseo, me permiten certificar que aquel solo olfativo que el otro día interpretaba para mí el naranjo de la imagen ha empezado a convertirse ya en un crescendo sinfónico que va alcanzando por igual a todos los rincones y angosturas que configuran el enclave histórico de esta agraciada ciudad.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Tus comentarios siempre serán correspondidos.